domingo, julio 31, 2005

Banda Sonora


Subimos a la micro en la Alameda para ir a bajarnos más o menos en la Plaza Ñuñoa. Todo corría con normalidad mientras estábamos sentados casi al fondo. Como si fuera una escena fílmica, notamos que la banda sonora que el director al volante nos dio para el momento era una canción que versaba en voz de Myriam Hernández: “amoramor, amoramor amargo, amor tan dulce, amoramor tan tierno…”. Con una mirada celebramos el mal gusto radial.
El camino seguía sin que eso nos afectara. Bastantes cuadras mas allá notamos de nuevo la misma voz diciendo “Qué peligroso amor es tu amor para mí, qué peligroso es y dulce a la vez…“. Dudamos si acaso era la misma canción que ya habíamos escuchado; momentos después lo confirmamos, cuando de nuevo irrumpió el coro. Caramba, pensamos, nuestro director se obsesionó con Myriam. No importaba, el viaje seguía. Y nuevamente el mismo amargo verso tan dulce tierno y peligroso y la cachaelaespada. Se nos chaló el chofer, concluimos. Y al momento, cuando ya casi le hacíamos una coreografía desde el fondo con los encendedores prendidos, notamos que la música no venía de la radio de la micro, sino de la radio que un pasajero abrazaba en el último asiento, al lado de la puerta. Luego de un rato, al término de la canción, y con su mirada sin foco hacia el paisaje, aquel hombre retrocedía el cassette para volver al comienzo del peligroso amor tan tierno, amargo, entero cuático. Comprendimos que pudo haber sido una falta de respeto burlarnos de dicha canción justo en el momento en que se hacía evidente que a nuestro amigo, a través de esos versos, se le iba la cordura. Aunque estábamos seguros también que él ni siquiera notó nuestra parodia al romanticismo. Parecía llevar días cruzando santiago de lado a lado y al abrazar la radio, abrazaba a esa mujer que puede que se llamara Myriam, puede que haya sido dulce, puede que haya sido amarga. Parecía que no le molestaban los largos tacos, ni la gente apretada, ni el carterista, pues lo único que le quedaba era una radio y un cassette que le recordaba algo por lo cual se merecía sufrir.
Creímos que esto lo convertía en un buen personaje, pero al notar que tenía su dedo listo para volver y volver a retroceder la cinta, concluimos que en realidad él era un mejor director sugiriéndonos la banda sonora de la pequeña escena de alguna película.


Titulo de la canción: Peligroso Amor
Compositor: Gogo Muñoz
Intérprete: Myriam Hernandez

Caso verídico.

Links

http://www.labutaca.net/reportaje/bandassonoras/index.htm
http://www.polaralert.com/exhibition/top100/index.html